La anulación de la compra de medicamentos, ordenada por la Secretaría Anticorrupción tras detectar irregularidades en el proceso comandado por Birmex, los laboratorios públicos de producción de vacunas, comienza a revelar los primeros problemas a la hora de cumplir con el abasto prometido, el mayor temor del sector médico. El Estado de Veracruz ha sido el primero en dar la voz de alarma. La gobernadora, Rocío Nahle, de Morena, reconocía el lunes la falta de insumos imprescindibles para tratamientos oncológicos y se ha mostrado dispuesta a que sea el propio Ejecutivo estatal quien asuma la compra. Este miércoles, durante su conferencia matutina, la presidenta, Claudia Sheinbaum, ha reconocido la carencia de algunos medicamentos necesarios para los tratamientos contra el cáncer.Nahle fue muy clara el lunes. “Hubo fallas en Birmex y eso se refleja en la falta de medicamentos”, dijo la mandataria estatal. “Entre que lo arreglan y no lo arreglan, voy a reunirme para dar instrucción de que se compren de forma inmediata”, añadió. La semana anterior, la gobernadora había solicitado al Centro Estatal de Cancerología un informe sobre el nivel de abasto del almacén, que depende en buena medida del IMSS Bienestar, dependencia del Gobierno federal, y la conclusión fue que “faltan muchas claves”, el nombre técnico con el que se designa el código que comparten los mismos medicamentos.Sheinbaum ha reconocido este miércoles la crisis. Algunos tratamientos contra el cáncer, ha dicho, “quedaron en este marco de la resolución de la Secretaría Anticorrupción”, es decir, estaban entre las adjudicaciones sospechosas por sobrecostes en la venta, que superaban los 13.000 millones de pesos. A diferencia de la compra de medicamentos que se adjudicó conforme a la ley, que será reasignada a quienes ganaron la oferta inicialmente, en estos casos debe realizarse el proceso desde cero, por lo que han quedado momentáneamente en un limbo que ya se está haciendo notar en los Estados y los centros médicos, la primera línea de batalla. “Desde la semana pasada autoricé una compra emergente de cuatro medicamentos oncológicos que se va a hacer a través de la subasta inversa, y ya se están adquiriendo para poderlos enviar”, ha revelado la presidenta esta mañana.Este lunes se notificó la posibilidad de hacer la compra y la investigación de mercado y, desde este martes, el proceso está en marcha. “Hay que estar en contacto con los gobernadores para que conozcan que se están atendiendo particularmente estos medicamentos, que evidentemente son de una urgencia importante”, ha incidido. Aunque estaba previsto que el proceso de adquisición, junto con el reparto de fármacos y demás material clínico, quedara resuelto en marzo, los problemas detectados durante la licitación, que han terminado con la declaración de nulidad de la compra al completo, están retrasando los plazos, que se alargarán, como mínimo, hasta mayo, según las estimaciones del propio Gobierno federal.Para solventar el problema lo antes posible, “en dos días, en vez de en un mes y medio”, el Ejecutivo ha recurrido a la fórmula de la subasta inversa, que consiste en poner a competir a los proveedores por precios cada vez más bajos, manteniendo el nivel de calidad. “Así se van a hacer todas las asignaciones de medicamentos al menos en este período. Eso nos va a dar más agilidad y también la garantía de que se van a entregar”, ha explicado Sheinbaum. Con el proceso iniciado ayer, ha dicho también, medicamentos que habían sido asignados por 38.000 pesos se están comprando ahora por menos de la mitad de ese precio.Evitada la parte de la corrupción, resta la del desabasto, y la mandataria ha atribuido parte del problema de reparto a las propias farmacéuticas, a las que ha acusado de no cumplir lo prometido. “Ganan una licitación diciendo que pueden entregar medicamentos en tal fecha, y después no los entregan”, ha reprochado, y ha advertido: “Hay un montón de medicamentos que no se han entregado en la fecha que los que ganaron la licitación dijeron que iban a entregar. Ahí va a haber sanciones, inhabilitaciones, incluso”.El plan del Gobierno para remontar el desabasto de medicamentos heredado del sexenio anterior, que alcanzó un nivel de insuficiencia del 30%, según las estimaciones del sector, no ha dejado de toparse con un contratiempo tras otro. La Subsecretaría de Salud dirigida por Eduardo Clark lanzó una megacompra de insumos en noviembre pasado para el periodo 2025-2026 con la idea de conseguir, al fin, adelantarse a las necesidades futuras. Sin embargo, las irregularidades detectadas en el 6% de las claves licitadas, 175 de casi 2.800, han convertido el proceso en un tortuoso camino que todavía no vislumbra el final. La presidenta anunció la destitución de al menos cinco funcionarios, incluido el director general de Birmex, que ha sido sustituido por el diputado morenista Carlos Ulloa. Sin embargo, con independencia de la limpieza del proceso, falta comprobar si los laboratorios estatales, históricamente encargados de la fabricación de vacunas ya hora reconvertidos en compradores de medicamentos, tienen la capacidad de organizar con eficacia una adquisición de estas dimensiones, que ya supera los 250.000 millones de pesos, sin haberlo hecho antes y con importantes complicaciones en el camino.
Las irregularidades en las compras de Birmex desatan la primera crisis de desabasto de medicamentos
5 min
