El vehículo oficial en el que se desplazaba el gobernador de Arauca, Renson Martínez Prada, recibió en la mañana de este lunes, entre 10 y 13 impactos de bala, mientras se desplazaba por la vía que conecta los municipios de Fortul y Saravena. Ese es el último episodio de violencia registrado en ese departamento que atraviesa uno de sus picos más altos en los últimos años.La confrontación entre el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y las disidencias de las Farc, bajo el mando de ‘Iván Mordisco’, ha convertido a este departamento en el principal escenario de la guerra en el oriente del país. Su posición geográfica y la condición de frontera con Venezuela lo mantienen en el centro de una disputa que mezcla control territorial, economías ilegales y poder político local.La camioneta oficial del mandatario, con blindaje nivel V, presentó pinchazos en las llantas y daños considerables en sus vidrios y estructura exterior como consecuencia del ataque y aunque el gobernador resultó ileso, reveló el nivel de inseguridad y violencia que se vive en la región.“Quien atenta contra un dirigente o líder política, cualquiera que sea su ideología o posición política, ataca directamente a nuestra democracia y Estado Social de Derecho. Eso no lo vamos a permitir”, dijo el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, al rechazar el atentado.Los soldados secuestrados en Arauca. Foto:CortesíaHoras antes del atentado, en la tarde del domingo, el Ejército reportó que cinco soldados del Batallón de Artillería de Campaña N.° 18 fueron secuestrados por hombres del frente Domingo Laín Sanz del Eln cuando viajaban entre Tame y Arauca durante su permiso.Estos hechos se suman a los dos agentes de la Dijín y funcionarios de la Fiscalía que continúan secuestrados en esa región, ellos son: Jesús Antonio Pacheco Oviedo y Rodrigo Antonio López Estrada, de la Fiscalía, y los agentes de la Dijín de la Policía, Yordyn Pérez Mendoza y Franque Hoyos Murcia. Estas personas están en poder del Eln.Indignación nacional por ‘juicio’ del Eln a cuatro funcionarios secuestrados en Arauca Foto:ArchivoEnfrentamientos de los grupos armadosLa Defensoría del Pueblo advirtió en su reciente Alerta Temprana No. 14 sobre el “riesgo extremo” que enfrentan las comunidades de Arauca, Arauquita, Saravena, Fortul, Tame, Puerto Rondón y Cravo Norte, así como el municipio boyacense de Cubará. La entidad señaló que los habitantes viven en medio del fuego cruzado entre el Eln y las disidencias de ‘Iván Mordisco. Los enfrentamientos, confinamientos y desplazamientos se han vuelto parte del día a día de la población rural.“Los enfrentamientos hacen que estén en peligro los derechos a la vida, integridad, libertad y seguridad de las comunidades de los siete municipios del departamento”, señaló la Defensoría.EL TIEMPO conoció que el Eln mantiene su centro de operaciones en el frente de guerra oriental, considerado el de mayor poder político y militar de esa guerrilla. En Arauca, el frente Domingo Laín concentra cerca del 25 por ciento de las acciones armadas del grupo en todo el país y cuenta con alrededor de 800 combatientes y redes de apoyo.El Eln hace fuerte presencia en Arauca. Foto:Archivo EL TIEMPOSu rival directo, las disidencias, suma aproximadamente 400 integrantes. Ambos buscan el dominio de los pasos fronterizos y las rutas del narcotráfico hacia Venezuela, donde la debilidad institucional y la corrupción facilitan los envíos a gran escala de cocaína.El conflicto ha transformado las dinámicas sociales y económicas del departamento. Las zonas rurales de Saravena, Arauquita y Fortul son las más afectadas por los combates, las minas antipersona y los desplazamientos masivos. Los actores armados controlan el tránsito de personas y mercancías, imponen pagos ilegales y ejercen presión sobre líderes comunitarios y autoridades locales.De acuerdo con la Defensoría, las comunidades han optado por el silencio para evitar represalias.Los indicadores de violencia reflejan la magnitud de la crisis. En 2024 se registraron 178 homicidios asociados al conflicto armado, con una tasa de 57,2 por cada cien mil habitantes, la más alta del país. Esa cifra superó ampliamente la media nacional y duplicó los niveles de departamentos históricamente violentos como Cauca o Chocó. LEA TAMBIÉN Con corte a septiembre de este año, la cifra llegó a 84 asesinatos, entre ellos 12 civiles, cuatro líderes sociales y dos firmantes del acuerdo de paz. En Tame, una masacre ocurrida el 25 de agosto dejó tres muertos y cuatro secuestrados en plena zona urbana.El periodismo local también se ha convertido en una profesión de alto riesgo. Según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), en 2024 se registraron 45 agresiones contra comunicadores en Arauca, superando los 31 casos del año anterior. De esas agresiones, 29 fueron atribuidas a grupos armados ilegales e incluyeron amenazas, desplazamientos forzados y obstrucciones al trabajo informativo. La Defensoría del Pueblo alertó sobre el “ambiente hostil” en el que los periodistas deben ejercer su labor, en medio de presiones y advertencias que buscan controlar la información que circula en el territorio.Mientras el Eln y las disidencias se disputan el control de corredores estratégicos, las comunidades permanecen confinadas, con una presencia institucional limitada y una economía marcada por la extorsión y el contrabando.Redacción JusticiaJusticia@eltiempo.comMás noticias de Justicia:

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