El proceso penal más importante en la historia reciente del país, el juicio al expresidente Álvaro Uribe, entra desde hoy a su etapa final. Ante la jueza Sandra Liliana Heredia llegó el turno para que arranquen los alegatos de conclusión con los que la Fiscalía y la defensa terminarán de exponer sus tesis, alrededor de si él es o no responsable de los tres delitos por los cuales es acusado, un caso que tiene de por medio la supuesta manipulación de testigos hecha por Uribe a través del abogado Diego Cadena.Este martes la palabra la tomará la fiscal Marlenne Orjuela, quien en los últimos meses, durante las 57 jornadas de presentación de testigos, mantuvo su hipótesis de que Uribe, en 2018, habría enviado a Cadena a distintas cárceles del país para que consiguiera testimonios de exparamilitares que declararan a su favor, desligándolo de la creación de un grupo paramilitar en los 90. A cambio, les darían beneficios judiciales y dádivas.La defensa del también jefe político del Centro Democrático ante estas acusaciones la encabeza el penalista Jaime Granados, quien ha insistido en que su cliente jamás determinó a Cadena para que fuera a prisiones, pues lo único que quiso escuchar fue la verdad de lo que querían decir, por cuenta propia, algunos ‘exparas’.Álvaro Uribe, expresidente en juicio. Foto:Archivo particularGranados había nombrado a 77 testigos para sustentar la tesis de que Uribe no es responsable de ninguno de los cargos, y al final presentó ante la jueza solo a 57, ya que desistió de algunos y otros no pudieron ser contactados. En el caso de Cadena, a quien llamó a dar su versión, no quiso rendirla, pues se le sigue un juicio paralelo en otro despacho por los mismos hechos, de los que también se ha declarado inocente insistiendo en que Uribe nunca lo mandó a ofrecer sobornos.Sobre el balance que les dejó la presentación de testigos y los alegatos que se avecinan, EL TIEMPO habló con Jaime Granados y con el penalista Miguel Ángel del Río, uno de los representantes de las cuatro víctimas del proceso.Diego Cadena, abogado. Foto:EL TIEMPOEl abogado del expresidente ratificó que “el balance de los testigos presentados por la Fiscalía fue ampliamente favorable para la defensa. Ni uno solo de ellos permitió establecer, ni remotamente, que Álvaro Uribe hubiese determinado a otra persona para cometer los delitos de soborno en actuación penal, soborno simple y fraude procesal. En eso la Fiscalía fracasó rotundamente”.Frente a su trabajo con los testigos llevados al juicio, Granados indicó: “Se probó nuestra teoría del caso, la completa ajenidad de Uribe a los delitos; y cómo, por el contrario, existió un complot para vincularlo, por razones políticas, a este proceso. Quedó claro que se interceptaron sus comunicaciones de manera ilegal”.Jaime Granados, abogado del expresidente Uribe. Foto:AudienciaPor su parte, el abogado Del Río subrayó que este no es un proceso político, sino judicial y que “están dadas las condiciones para una sentencia condenatoria. Los testigos de la Fiscalía pudieron demostrar ese conocimiento que tenía Uribe como determinador”.”En las próximas semanas se vienen alegatos finales de ambos juicios, es decir que podemos tener decisiones simultáneas en el proceso de Cadena y en el de Uribe”, cerró Del Río.Sobre el considerado testigo estrella del caso, el condenado Juan Guillermo Monsalve, los penalistas sentaron distintas posturas. Para Granados quedó en evidencia que el preso en la cárcel La Picota no es testigo de nada, pues no dijo en audiencia que le constara que el expresidente hubiera mandado a Cadena para que lo sobornara. Por su parte, para Del Río fue contundente porque se quería demostrar su pertenencia a grupos paramilitares y la visita de Cadena en febrero de 2018, para que supuestamente se retractara.Miguel Ángel del Río, abogado. Foto:Archivo particularDespués de que intervenga la Fiscalía, el turno será para las víctimas, les seguirán la Procuraduría, Jaime Granados y Álvaro Uribe, quien declarará de manera presencial en los juzgados de Paloquemao. Luego habrá una segunda ronda para observaciones que tengan el ente acusador o desde la bancada defensiva. El fallo que dicte la jueza seguramente será apelado y escalará al Tribunal Superior de Bogotá, en un caso que prescribe el 16 de octubre.Carlos López – Justicia – @JusticiaET – carben@eltiempo.com
