El joven de 15 años que disparó contra el precandidato presidencial Miguel Uribe se declaró inocente de los varios tiros que le propinó el pasado sábado, durante un evento político realizado en el barrio Modelia, de Bogotá. La decisión, que a primera vista parece extraña debido a que en varios videos quedó registrado cómo accionó el arma Glock 9 milímetros, podría deberse a una estrategia jurídica.El ataque sicarial al candidato conmocionó al país desde el primer momento. En redes sociales empezaron a compartirse las imágenes y videos del estado en el que quedó luego de recibir los disparos del menor aprehendido, quien intentó huir por detrás del parque El Golfito, donde la víctima compartía con sus simpatizantes.Al joven llegaron por cuenta de una herida en la pierna que le dejó la reacción al ataque, y que incidió en que fuera aprehendido por la Policía una cuadra después del parque, donde mientras lo detenían gritó que iba a entregar unos números de teléfono. De ahí lo llevaron a una clínica ubicada al occidente del país, donde se recuperó y fue trasladado hacia el búnker de la Fiscalía.Por su parte, el precandidato presidencial está en la UCI de la Clínica Santa Fe, bajo un pronóstico reservado por parte del grupo de expertos que lo han atendido desde el primer día.El menor de 15 años disparó un arma 9 milímetros. Foto:Captura redes socialesEl proceso judicialLa audiencia de legalización de dicha aprehensión se hizo en la medianoche del domingo, y duró hasta las 2 de la mañana del lunes. Sin embargo, no procedió a imputarle cargos inmediatamente debido a su estado de salud. De hecho, aunque se programó hacerlo a las 3 de la tarde de ese día, por recomendación médica fue postergada hasta este martes.A la diligencia se presentó con un abogado de la defensoría pública, y luego de escuchar la narración que hizo la Fiscalía, negó los hechos. EL TIEMPO habló con expertos sobre qué implica esa decisión, y resaltaron que puede deberse a un par de factores.Sicario que atentó contra Miguel Uribe. Foto:Redes socialesUna fuente allegada al proceso manifestó que el no haber aceptado los delitos, lleva a la Fiscalía a sustentar mejor ante un juez todas las peticiones que realice contra él en este caso. Por su parte, el penalista Juan Felipe Criollo manifestó que como la sentencia a la que se expone el joven es tan amplia -va de dos a ocho años internado en un centro especial-, “puede que su declaratoria de no culpabilidad esté encaminada a buscar algún tipo de acuerdo. Si bien tampoco hay la figura propiamente del principio de oportunidad, eso no quiere decir que no pueda negociar con la Fiscalía a cambio de información, porque como es un sistema penal pensado en la resocialización del menor, son reglas mucho más flexibles”. Menor de edad que disparó contra Miguel Uribe Turbay caminando por Modelia Foto:Noticias UnoOtro escenario que planteó el abogado es que el menor, con lo que sabe, intente buscar una pena más baja. “Por otro lado, puede ser que le sirva esa no aceptación como un instrumento de protección para él y su familia, al intuir que tiene información relevante que pueda generar algún tipo de vulneración a su seguridad personal y familiar”, resaltó el penalista.Por su parte, el abogado Francisco Bernate resaltó que la decisión de no aceptar cargos puede generar extrañeza, pero se explica en que probablemente “quiere dejar su situación para que se resuelva en un juicio. Recordemos que en el régimen legal de los menores no tienen beneficios por aceptar los cargos como ocurre con los adultos”.Momentos de la aprehensión del menor que atacó a Miguel Uribe Turbay Foto:Archivo particularO sino, porque está en busca de una negociación con la Fiscalía. “Cuando estos procesos están en curso no se aceptan los cargos, y posteriormente se presentan los acuerdos a los que se lleguen, que, en este caso, podría ser un principio de oportunidad”, dijo Bernate.Carlos López – Justicia – @CarlosL49 – carben@eltiempo.com
